
En una entrevista concedida a la edición británica de la revista Marie Claire, Rihanna afirma que aún se pregunta por qué le ocurrió aquello: "Dios tiene una forma extraña de obrar, y cuando te pasan estas cosas piensas: "¿Qué he hecho yo para merecer esto?". Pero, a la vez, mira el lado positivo: "Necesitaba una llamada de atención que me despertara, un punto de inflexión, y creo que Dios me lo dio".
La cantante afirma que su relación con Brown ya estaba acabada en el momento de la agresión, pero que ninguno de los dos se decidía a dar el paso para romper con el otro. Sin embargo, Rihanna hoy es feliz porque esta viviendo una magnifica relación con el jugador de béisbol Matt Kemp: "Siento que ahora sonrío de verdad, la sonrisa brota del interior y se respira en todo lo que hago. La gente siente que mi energía es diferente. Cuando ahora sonrío se puede decir que es por pura felicidad y no sólo por aparentar".
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